jueves, 28 de febrero de 2013


   Es difícil de entender cuando decimos que buscamos la media naranja o por el contrario su antónimo con el medio limón. ¿No es extraño esa comparación de cítricos?, ya podíamos haber elegido otro tipo de símil que se adecuara más al ser humano.
   En otras ocasiones y a raiz de un poema de Mario Benedetti, he contado mi teoría de los "pies hermosos"......y si no, fijarse en ello. Porque ¿Quién va por la calle fijándose en los pies de los demás?,      ¿Quien va por ahí besando o lamiendo los pies ajenos?, Evidente mente nadie hace esas cosas, no toleramos los pies propios, así que menos los de los demás.
   Sin embargo es una situación que puede cambiar y convertirse en un deseo irrefrenable, en algo totalmente romántico y sensual. Es evidente que hablo cuando se presenta la pasión, del deseo por esa persona, que cuando llega, desaparecen todos los obstáculos, se difuminan todos los perjuicios.

   Unos dedos que se deslizan suavemente a o largo de la pierna, navegando por los pliegues de su piel, hasta detenerse en los tobillos para volver a empezar en la cadera una vez más. Punto de partida para jugar con su pie, cuyos dedos juegan traviesamente a esconderse de tus deseos, de la pasión de tus labios...Con la luz tenue que se difumina su cuerpo, sujetas su pierna arqueada, dejando que se acerque el empeine hacia tu boca.
   De ese modo encuentras los "Pies hermosos", los que nunca buscaste, los pies en los que nunca te fijaste, pero que encontraste y les juraste servidumbre y fidelidad, un pie diferente al resto, que se muestra delicado entre tus labios...........

   Si, amor, ese bendito veneno que convierte la locura en lucidez.

domingo, 24 de febrero de 2013

Soneto al tabaco




Aquí no se prohíbe, se agradece
cualquier humo que huela a nicotina,
aquí puede fumar su tagarnina
el cigarrillo "light" si se le ofrece,

O la fragante pipa, que parece
un pebetero de pagoda china;
celtas, ducados, caldo de gallina,
hasta un canuto, si es que le apetece.

Una disposición que discrimina
al fumador, aquí no se obedece,
pues el humo que el aire contamina,

el que nuestros pulmones ennegrece, 
es el del gasóleo y de la gasolina
 y todo lo demás son idioteces.

jueves, 14 de febrero de 2013

Entre humos




Entre nieblas me seduces.
al calor e tu enamorar,
que todo mi cuerpo desea,
y no te puedo parar.

Papel que te recubre
y la llama consume,
planta que un día fuiste,
y mi cuerpo rezume.

Como te deseo cada día,
como te añoro al despertar,
que si no estas desespero,
y a la calle te he de busca
r.

domingo, 10 de febrero de 2013

Te espero en los sueños



Te espero en los sueños,
donde todo se vuelve realidad,
te espero en mis fantasía
donde podre abrazarte de verdad.

Nos vemos en los sueños,
donde besos vienen y van,
los recojo de la almohada,
y en m corazón vivirán.

Un ángel me visita cada noche,
dándome el calor celestial,
sus besos merodean en mi boca,
contienen un sabor sensual

domingo, 3 de febrero de 2013

Palpitar




Deja que mi corazón palpite, lo que quiera gritar,
que mis labios te besen, como te quieran besar,
que mis dedos te acaricien, sin control y sin parar
deja que mi piel te diga, que me puedes amar.

Déjame bajar lentamente, a donde quiero llegar,
y subir palmo a palmo, hasta llegar al final,
con todos mis sentidos puestos, poderte amar,
poder llegar juntos, a este deseo sensual.

sábado, 2 de febrero de 2013

Sueños





Antes de sucumbir a los sueños,
mis deseos de ti afloran,
buscando tu imagen en mi retina,
el sabor a ti en mis labios.

Mis sentidos se turban al recordar,
tu cuerpo esparcido entre las sabanas,
derramando tu ternura en mis brazos,
sintiendo tus pechos en mi torso.

Mis dedos dibujan lineas en tu piel,
sintiendo cada pliegue de tu espalda,
presagiando tu ternura en mis labios,
en un infinito deseo de besarte.

sábado, 29 de diciembre de 2012

Deseo



Deseo en el silencio de la noche,
recorrer la suavidad de tu piel
caminar desnudo revestido de ti
impregnando el perfume de mi ser.

Deseo besar tus labios,
y buscar dentro de ella,
el sabor dulce de tu néctar,
que tiene tu boca sabor a miel.

Deseo tu cuerpo que me transporta,
sintiendo tu espiración agitada,
y ver tu mirada apasionada
del fuego ardiente que brota